Doula de parto y de posparto

Doula de parto y de posparto

Doula es una palabra que se usaba en la antigua Grecia con un siginficado cercano a sirvienta. Yo no diría que una doula hoy en día es una sirvienta pero si puedo decir que sirve y de corazón.

CAPPA Latinoamérica ofrece 2 certificaciones como doula. Una es la doula de parto y la otra es doula de postparto. Y aunque no parezca, la diferencia es realmente grande.

La doula de parto, es la mujer que está presente en el momento de parto, cuidando el ambiente que rodea a la mujer que está por dar a luz.

La doula de parto tiene habilidades que facilitan el momento de parto y está atenta a las necesidades de la mamá. Estudios han demostrado que su pura presencia relaja a la mamá, lo que facilita el parto.

Además puede hacer uso de herramientas para darle a la mamá confort. Entre esas herramientas están masajes, vocalizaciones, uso de aceites y aromas, invitarla a probar posiciones, presión en ciertos puntos, etc.

Una doula de parto también es un vinculo entre el profesional de salud y la pareja, algunas veces trabaja como ‘traductora’ de las indicaciones médicas, o puede tranquilizar a los padres para que tomen decisiones importantes.

En el mes de Febrero se publicó el artículo ‘Yo he visto el amor verdadero’ que describe el nacimiento desde los ojos de la doula, no te lo pierdas.

Por otro lado, la doula de posparto, es esa ayuda oportuna que llega en los momentos más escabrosos de la maternidad y lleva paz a la mamá.

Tiene habilidades diferentes a la doula de parto, ya que su misión es con una mamá que tiene un bebé en brazos.

La doula de posparto puede ser también una ‘traductora’ pero en este caso explicará a la mamá las necesidades de su bebé y la manera más eficaz de atenderlas.

Cuando un bebé llega a la vida de la familia, se despliegan cambios fuertes e importantes, que pueden generar estrés en la mamá, quien además debe cubrir los cuidados de un bebé que no trae un instructivo. Y aunque su mejor aliado es su mismo instinto, la doula de posparto da la tranquilidad para que ella pueda conectarse con su bebé y con ella misma.

Una doula de posparto no da atención directa al bebé, ella acompaña a la mamá en ese camino… ella es una amiga silenciosa, comprensiva y muy respetuosa.

Como ves, ambas doulas son una expresión perfecta del servicio a la maternidad pero en momentos diferentes, aunque ambos cruciales.

¿A ti donde te gustaría servir a la maternidad?

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